Conocida así por haber sido descrita por el Barón Dupuytren en el año 1.831. Es un engrosamiento de la fascia palmar y produce una limitación en la extensión de los dedos de la mano afectada. Es una enfermedad progresiva y de evolución continuada. Se caracteriza por la aparición de unos nódulos o "durezas" en la palma de la mano, que luego se forma una banda longitudinal y después aparece la dificultad de la extensión de los dedos.

Las causas no son muy conocidas y se atribuyen diferentes mecanismos productores. Afecta más a los pacientes varones que a las mujeres y en ocasiones es de afectación bilateral, es decir en las dos manos.

La solución es quirúrgica y consiste en extirpar ése engrosamiento de la fascia (estructura que recubre todos los tendones) y que es la causante de la dificultad de extender los dedos. Se realiza, como en casi toda la cirugía de la mano con anestesia regional del miembro superior y en cirugía ambulatoria de Hospital de Día.



Los pacientes deberán tener un período de unas dos semanas antes de poder reincorporarse a sus actividades cotidianas, aunque en algunos casos la recuperación es más larga y pasan hasta cuatro semanas. En algunos casos se deberán realizar sesiones de Rehabilitación, que pueden durar, dependiendo de cada caso, hasta varios meses.