MAMOPLASTIA DE REDUCCIÓN"
El propósito de la mamoplastia de reducción es la disminución del tamaño de las mamas; las mujeres que tienen unas mamas grandes se pueden encontrar con problemas a consecuencia del peso y tamaño de las mamas, dolores en espalda, cuello, hombros, y/o irritación en la piel submamaria. La reducción del tamaño, se realiza tanto para mejorar estos síntomas como para mejorar el aspecto de las mismas. Algunas chicas jóvenes sufren un desarrollo excesivo de las mamas que se denomina hipertrofia virginal y que requieren una reducción de volumen.

¿NECESITO REDUCIR MIS PECHOS?
Si Ud. tiene cualquiera de estos síntomas, debería plantearse la reducción de sus mamas:

- Dolores en la espalda, cuello u hombros.
- Mamas pesadas y colgantes con aréolas y pezones bajos.
- Irritación constante de la piel debajo de sus mamas.
- Marcas en sus hombros causadas por el sujetador.
- Actividades físicas restringidas debido al gran tamaño de sus mamas.

Normalmente se realiza una mastopexia para elevarlas a su correcta posición y así mismo se reducen las aréolas y las glándulas mamarias al tamaño adecuado. La mayoría de técnicas quirúrgicas dejan cicatrices alrededor de la aréola, verticales y horizontales en el pliegue inframamario.

¿CÓMO ES EL PROCEDIMIENTO QUIRÚRGICO?
La intervención se realiza bajo anestesia general y durante la misma se extirpa piel, glándula mamaria y grasa perimamaria. El método más común utiliza una incisión de tres partes: La primera circunda la aréola, la segunda va verticalmente desde el borde inferior de la aréola hasta el pliegue submamario y la tercera es una incisión horizontal a lo largo del pliegue submamario.

Después de eliminar el exceso de tejido, grasa y piel, se reduce la aréola y se traslada junto con su pezón a una posición más elevada, ambos permanecen adheridos para preservar toda su sensibilidad.

En este punto se utiliza a menudo liposucción ultrasónica para modelar los contornos de los lados de las mamas. Se requiere un día de hospitalización. A veces se tienen que dejar drenajes, que se retirarán a las 24 ó 48 horas posteriores a la intervención. Se suele dejar un sujetador o, en ocasiones, un vendaje.

¿CÚALES SON LOS RESULTADOS?

La mayoría de las pacientes no sienten dolor después de la operación, pero sí tienen cierto malestar. Cualquier tipo de dolor o malestar puede solucionarse mediante calmantes.

Posteriormente a la operación, tres semanas más o menos, se retirarán las suturas y durante un período de tres a cuatro meses se limitará la exposición al sol.

La reducción de las mamas produce un cambio importante en la imagen del cuerpo, y la paciente se siente más cómoda al estar más proporcionadas con el resto de su cuerpo.

Las cicatrices están en actividad hasta casi un año después de la intervención, siendo entonces cuando serán, en general, poco aparentes.

Descargar consentimiento informado